OZONOTERAPIA EN HEPATITIS VIRAL

La ozonoterapia es una técnica médica en la que se utiliza una mezcla de oxígeno y ozono con fines terapéuticos. En el caso de la hepatitis viral, la ozonoterapia se emplea como una terapia complementaria con el objetivo de mejorar el estado general del paciente, reducir la inflamación hepática, modular el sistema inmunológico y potenciar la oxigenación celular. A continuación, te explico los principales mecanismos de acción en este contexto:

 

1. Efecto antiviral

El ozono tiene propiedades antimicrobianas, incluyendo actividad antiviral. Esto puede ayudar a:

  • Inactivar ciertos virus al alterar su estructura externa y bloquear su replicación.
  • Disminuir la carga viral, lo que reduce el estrés sobre el hígado.

2. Modulación del sistema inmunológico

El ozono estimula la producción de citoquinas y regula la respuesta inmunitaria, lo que es crucial en la hepatitis viral. Esto puede:

  • Reducir la inflamación crónica en el hígado causada por la actividad del virus.
  • Favorecer un equilibrio entre las respuestas proinflamatorias y antiinflamatorias.

3. Mejora de la oxigenación celular

El ozono promueve una mejor liberación y utilización del oxígeno en los tejidos. Esto beneficia al hígado al:

  • Mejorar la función hepática en general.
  • Promover la regeneración de hepatocitos (células del hígado dañadas por el virus).

4. Reducción del estrés oxidativo

Aunque el ozono genera peróxidos de forma controlada, también activa enzimas antioxidantes como la superóxido dismutasa (SOD) y la catalasa. Esto:

  • Protege a los hepatocitos del daño oxidativo causado por la inflamación crónica.
  • Ayuda a restaurar el equilibrio entre la producción de radicales libres y la capacidad antioxidante del cuerpo.

5. Efecto antiinflamatorio

El ozono reduce marcadores inflamatorios como la interleucina-6 (IL-6) y el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α), lo que disminuye la inflamación en el hígado, un problema clave en la hepatitis.


Aplicación de la ozonoterapia

La ozonoterapia en pacientes con hepatitis viral puede administrarse de varias formas, dependiendo del protocolo y el estado del paciente:

  • Autohemoterapia mayor: Extracción de sangre, mezcla con ozono, y reinfusión al paciente.
  • Insuflación rectal: Introducción de ozono en el recto, que actúa como una vía indirecta para alcanzar el hígado.
  • Aplicación subcutánea o intramuscular (menos frecuente en hepatitis).

Consideraciones importantes

  • Terapia complementaria: La ozonoterapia no reemplaza los tratamientos médicos estándar para la hepatitis viral, como los antivirales. Es una herramienta adicional para mejorar la calidad de vida y reducir los síntomas.
  • Seguimiento médico: Siempre debe ser realizada por un profesional capacitado y con protocolos ajustados al paciente.
  • Contraindicaciones: La ozonoterapia está contraindicada en casos de hipertiroidismo descontrolado, enfermedades hemorrágicas y embarazo.

Si bien la evidencia sobre su eficacia en hepatitis viral sigue siendo explorada, muchos pacientes reportan beneficios en su estado general y funcionalidad hepática.